Una cuarta parte de los estadounidenses apoya los movimientos secesionistas, según una encuesta reciente. Esta tendencia refleja una creciente polarización y tensiones entre gobiernos locales y el federal en temas como seguridad fronteriza e inmigración.
New Hampshire, con su movimiento NHEXIT, acusa al gobierno federal de llevar al país a la bancarrota. El 23% de los adultos en el estado apoyarían la secesión. En Alaska, el 36% de los encuestados favorece la independencia, impulsada por el Partido de la Independencia de Alaska (AIP). En Texas, el 31% de los adultos respalda la secesión, promovida por el Movimiento Nacionalista de Texas (TNM). El 29% de los californianos también apoya la independencia, argumentando que el estado paga más impuestos de los que recibe en gastos federales.
Movimientos similares existen en Nueva York, Oklahoma, Nebraska y Virginia Occidental.
Fuente de la noticia, diferentes organizaciones.
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