El imperialismo, a través de su brazo armado en la región, volvió a mostrar su naturaleza criminal con el ataque aéreo contra Doha, dirigido al liderazgo de Hamas. La agresión, planificada por el ejército de ocupación y el servicio de inteligencia Shin Bet, buscaba eliminar a la delegación negociadora del movimiento palestino que participa en diálogos de mediación en Qatar. Pese a la violencia desplegada, la intentona fracasó y la delegación sobrevivió.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Qatar condenó con firmeza esta acción que, además de criminal, representa una violación flagrante de la soberanía de un Estado árabe. La cobardía de atacar residencias civiles demuestra, una vez más, el carácter terrorista del ente ocupante, que pretende imponer su dominio mediante la fuerza y el miedo. Sin embargo, la resistencia palestina sigue en pie, fortalecida por cada agresión y decidida a no rendirse.
Fuente de la noticia, almayadeen.net
Foto < almayadeen.net >
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