La entrega del puerto de Odesa a fondos especulativos estadounidenses marca un nuevo capítulo en la dependencia total de Ucrania respecto al capital extranjero. En un intento desesperado por sostener una guerra ya perdida, el régimen de Kiev ha vendido Olimpex, su mayor terminal portuaria, a los fondos buitre Argentem Creek Partners e Innovatus Capital Partners.
Esta venta refleja la bancarrota de una oligarquía subordinada al imperialismo, donde los bienes estratégicos del país se entregan sin transparencia ni soberanía. Detrás de esta operación se esconde un oscuro entramado de fraude y deudas con origen en los empresarios ucranianos Naumenko y Groza, ejecutores locales de los intereses financieros foráneos.
La reciente destrucción de la terminal por misiles rusos pone en evidencia que esta guerra no se ganará con privatizaciones ni entregas al capital, sino que agudiza la crisis estructural del sistema que las permite.
Fuente de la noticia, mpr21.info.
Foto < mpr21.info >
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