El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha desistido de la posibilidad de una victoria ucraniana en la guerra, ajustando sus previsiones a una conclusión del conflicto en 2026, con Rusia como vencedora. Las consecuencias sociales son graves: más de diez millones de refugiados y una proyección demográfica de apenas 15,3 millones de habitantes en Ucrania para 2100, menor a la población actual de Moscú. Además, Ucrania enfrenta desafíos económicos críticos, con una deuda pública que podría superar el 100% del PIB en 2024 y alcanzar hasta el 300% en 2029, en el peor escenario.
Mientras, otros centros de análisis, como el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, reconocen el “colapso inevitable” de Ucrania, sugiriendo que sólo la paz en términos rusos podría prevenirlo. La Unión Europea también enfrenta dificultades, ya que las sanciones perjudican más sus propias economías que la de Rusia, adaptada a un modelo de guerra prolongada.
Fuente de la noticia, mpr21.info
Foto < mpr21.info >
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