martes, 13 de julio de 2021

La tranquilidad en Cuba habla de una escaramuza fracasada


Las calles de Cuba no amanecieron este lunes «hirviendo» de personas en protestas, como habrían querido los orquestadores, intelectuales y ejecutores, de los disturbios de este domingo.

Las tensiones con que amaneció el país no son otras que las que hace ya semanas y meses genera el enfrentamiento de un país a la pandemia mortal de la COVID-19, movilizado por su gente en protección de su propia gente.

Las tensiones no son otras que esas que provoca la obstinación cobarde de cerrar todas las puertas económicas a la nación.

Las otras, las que fabrican de manera artificial, a base de información manipulada, de esas «verdades» que dependen de facturas, de gente comprada, de esos extras de película que no saben actuar sin actos de vandalismo, de marginalidad, de delincuentes que la emprenden con piedras, contra entidades estatales, que vulneran y roban tiendas, que atacan a la fuerza pública y se articulan en bandas que muerden y escapan, en representación de un caos social que desean, pero que no existe… esas, no amanecieron este lunes en Cuba.

A la respuesta enérgica del pueblo, la que salió al paso de la turba violenta que, por focos e intentonas, tuvo lugar en varias partes del país, siguió una noche tranquila y una jornada de lunes que da cuenta, según se ve, de que la escaramuza enemiga no fue, sino eso, una vez más sofocada por la resistencia de una Revolución que se defiende a sí misma, negada a retroceder ni a rendirse, mientras lucha abrazo partido contra todas las trabas que le ponen.

Fuente de la información http://www.granma.cu/

Foto http://www.granma.cu/

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.