Los Cascos Blancos están involucrados desde su fundación en el tráfico de órganos humanos.

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  El director de la Fundación Rusa para el Estudio de la Democracia, Maxim Grigoriev, en un estudio titulado: “Los Cascos Blancos… instigadores del terrorismo y fuentes de desinformación” dijo que los mismos están involucrados en la extirpación forzada de órganos humanos de los sirios que viven en áreas dominadas por las agrupaciones terroristas armadas.

Grigoriev añadió a su explicación, citada por la agencia TASS sobre los crímenes en Siria, precedentes al respecto de la actuación del fundador de los “Cascos Blancos” James Le Messurier, quien fue encontrado muerto cerca de su casa en la ciudad turca de Estambul en circunstancias sospechosas.

Dijo que cuando Le Messurier se encontraba en Yugoslavia a finales de la década de 1990 la extracción de órganos humanos y su tráfico estaba en pleno apogeo en Kosovo.

Grigoriev confirmó que los órganos humanos de habitantes de Serbia fueron traficados en los lugares donde vivía dicho cabecilla y que el mismo sistema fue implantado en Siria.

Como era de esperar, pocos días después de que el Ministerio de Exteriores ruso revelara la conexión de Le Messourier con la organización terrorista del otrora Frente Al Nusra y exigiera al gobierno británico que explicara sus presuntos vínculos con la organización, Missourier fue hallado muerto el 11pasado de noviembre.

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